La pregunta no es ¿cómo vamos a salir de esta crisis?, sino ¿cómo vamos a salir de esta crisis 10 veces más reforzados?
Cada crisis es diferente, y este momento es diferente a todos los que hemos visto antes. En cuestión de semanas hemos cerrado nuestras ciudades, la economía se ha frenado de manera brusca, y se ha impuesto un terrible sufrimiento personal y una gran incertidumbre global. Hemos recorrido a nuestras reservas más profundas de paciencia, desinterés, ingenio y amabilidad.
Para muchos esta no es la primera vez que nos enfrentamos a un mundo en crisis. Haber navegado en ese momento difícil ofrece una perspectiva útil ahora, particularmente a medida que lidiamos con los impactos en el negocio.
Todo ello está cambiando la forma en la que trabajamos y en nuestras necesidades y comportamientos como consumidores.
La historia muestra que tales cambios no siempre son temporales: las crisis pueden reformular fundamentalmente nuestras creencias y comportamientos. ¿Cómo pueden las empresas prepararse para un mundo posterior a la crisis, en lugar de sentarse y esperar un regreso al pasado?
Es fundamental entender que no solo la economía se está transformando para siempre, nuestros equipos, nuestra forma de trabajar, la mentalidad y las rutinas de nuestros clientes y consumidores también cambiará de forma significativa.
Están surgiendo nuevas necesidades y de ahí nuevas oportunidades, que nos deberán permitir salir reforzados.
En donde sí podemos influir es en cómo en el ámbito profesional y a título individual gestionamos esta situación. Si logramos situar un “estado mental” de oportunidad y de positivismos tendremos más posibilidades de salir reforzados de esta crisis.
Para la mayoría de las compañías, aunque impactadas en el corto, tienen la ventaja de tener equipos sólidos y comprometidos, con experiencia y capacidad de adaptarse a los cambios de futuro, con el fin de salir reforzados de esta crisis. Debemos creer en ello.
Si estamos de acuerdo que estos cambios están aquí para quedarse ¿Cómo tenemos que reaccionar como equipo? ¿Qué debo hacer yo diferente? ¿Qué puedo aportar al equipo que no estoy aportando? ¿Puedo liderar nuevas iniciativas? ¿Qué actitud es la necesaria a partir de ahora? ¿Qué se espera de nosotros? ¿Cómo vamos a liderar y a lidiar con esta oportunidad de cambio? y nuestra pregunta favorita ¿Qué debemos hacer para salir 10 veces más fuertes de esta crisis?
“Nos movemos y nos convertimos en lo que pensamos. Nuestros pensamientos actuales determinan nuestro futuro” Lou Tice.
Por lo que tenemos que trabajar con nuestro equipo en su principal herramienta para determinar el futuro, la actitud resiliente. Integrar el concepto de resiliencia de equipo, como palanca de cambio, como la excusa perfecta para salir 10 veces más fuertes.
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